martes, 7 de febrero de 2012

CRÍTICA DE "KATMANDÚ, UN ESPEJO EN EL CIELO"

El pasado viernes llegaron a la gran pantalla dos de los grandes estrenos que nuestro cine tiene preparado para el 2012: "Promoción Fantasma", de la que ya os hablamos en la crítica que realizamos sobre ella el pasado viernes; y "Katmandú, un espejo en cielo", nueva cinta de Icíar Bollaín tras "También la lluvia", que ha recibido dos nominaciones a los Premios Goya: como Mejor Guión Adaptado, y como Actriz Protagonista, para una Verónica Echegui que anoche mismo, logró el premio, por esta misma película y en este mismo apartado, en  los Premio Gaudí 2012. Más que merecido premio.



En "Katmandú, un espejo en cielo", Laia, una joven maestra catalana, se traslada a Katmandú para trabajar en una escuela. Allí descubre una pobreza extrema y un panorama educativo desolador que, además, excluye a los más necesitados. Tras contraer, a su pesar, un matrimonio de conveniencia para legalizar su situación, emprende un ambicioso proyecto pedagógico en los barrios de chabolas de la ciudad, aunque pronto se da cuenta de que necesita ayuda para hacerlo realidad. Al mismo tiempo, de forma inesperada, se enamora de su marido. Siguiendo a Sharmila, una joven maestra nativa, emprende un viaje hasta el fondo de la sociedad nepalí y, también, hasta el fondo de sí misma. 

Drama este, basado en la historia real de la maestra Victoria Subirana, más conocida como Vicky Sherpa, una catalana nacida en 1959, que descubrió que su trabajo era mucho más útil en un país sin alfabetizar. De hecho, la película funciona como adaptación de su libro "Una maestra en Katmandú", aunque avisa desde el principio que es eso, una adaptación cinematográfica, y que no todo lo que vemos se corresponde con la realidad.

Y es evidente que, con esta película, Icíar Bollaín nos lanza un bonito mensaje, que cuenta con un fondo precioso. Pero también es cierto, que su superficie es más complicada,  y que, además (y esto lo digo como futuro maestro), está bastante idealizada. Y logra una gran contradicción: todo lo "peliculera" que es en cuanto a esta idealización, lo tiene de "poco peliculera" en cuanto a su ritmo, que no es que sea bajo, ni mucho menos alto: es simplemente rutinario, igual desde el principio hasta el final, amén de contar con un par de innecesarios flashbacks. No hay sorpresas. Bueno, miento. Hay una. Cuando la película termina, inesperadamente.

Pero una vez evaluados sus puntos negativos, pasemos a hablar de sus virtudes, donde hay dos que destacan por encima del resto. En primer lugar la fotografía: visualmente "Katmandú, un espejo en el cielo" es simplemente impresionante. Imágenes dignas del mejor National Geographic.

Y el segundo, y aún más importante, es Verónica Echegui. Parece que ha llovido mucho desde que Bigas Luna nos la descubriera como aquella protagonista de "Yo soy la Juani", pero ni siquiera han pasada 6 años. Y desde entonces, su carrera es meteórica, imparable... "El menor de los males", "El patio de mi cárcel", "La casa de mi padre", "8citas", "La mitad de Óscar", "Verbo", esta "Katmandú...", la futura, y por mi parte esperadísima "Seis puntos sobre Emma"... Trabajando con todos los directores (nunca ha repetido dos veces con el mismo) y todos hablan maravillas de ella; tocando todos los géneros, y brillando en todos ellos... Esta vez el turno le ha tocado a Icíar Bolláin. Esta no es su mejor película, no será la película del año; pero si deja una gran oportunidad de lucimiento (o,  en caso de salir mal, de hundimiento) a su protagonista: y Verónica Echegui no desperdicia esta bola de partido. Y el film será siempre recordado por esta actuación.

Por si acaso quedaba alguna duda, en "Katmandú, un espejo en el cielo", se nos despejan todas. Verónica Echegui no es una promesa de nuestro cine, es una realidad, además de mi (y he dicho mí, que no la) favorita a los Premios Goya, a pesar de la maravillosa competencia con la que se tiene que ver las caras. Convierte una complicadísima interpretación en un papel memorable, cargando absolutamente con todo, y remarco el todo, el peso de esta película. Brillando, sobrecogiendo, emocionando... A falta de encontrar otra palabra mejor, escribiré magnífica.

MI VALORACIÓN: 7

No hay comentarios:

Publicar un comentario